Los egipcios son considerados los mejores anatomistas de la Antigüedad. Esto es porque en un tiempo tan lejano como hace 5000 años, fueron ya creadores de las primeras descripciones anatómicas en papiro.
Además, los egipcios sentían ya una gran curiosidad por el cuerpo humano, sobretodo para someter a sus grandes figuras al embalsamamiento, por el cual se creía que se llegaba a la inmortalidad del espíritu.
Este acto consistía en extraer las vísceras del cuerpo, a excepción de los riñones y el corazón. Tras eso, el cadáver era rellenado con un compuesto a base de hierbas y ungüentos y, una vez restaurado, el cuerpo era rociado con aceites y envuelto en vendas. Finalmente, las ya momias eran depositadas en un sarcófago junto a algunos amuletos.
Estos embalsamamientos eran ya una acción común, y como ya he mencionado, llevaban en sí mismas una disección, la cual siglos más tarde sería prohibida. Esto prueba que los egipcios eran, en algunos aspectos, más avanzados que otras civilizaciones posteriores.
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